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Turismo

Centro de Interpretación Valle del Huecha

Este Centro de Interpretación es una invitación a recorrer y descubrir los parajes y rincones llenos de historia, belleza y vida del valle del Huecha, un extraordinario viaje en el que acompañaremos el curso del río, desde su nacimiento en las laderas de la Sierra del Moncayo hasta su desembocadura en el Ebro en Novillas, al tiempo que nos va desvelando todos los secretos de esta región.

Gracias al interés y la importante labor de los vecinos del Valle del Huecha, que han restaurado y cedido la mayor parte de los objetos que aquí se exponen, el visitante tendrá la oportunidad de acercarse y experimentar la vida como era antes. A través de nuestro valle. De todo este rico patrimonio material e inmaterial se podrá conocer y sentir el pasado.

Web. http://www.valledelhuecha.com/

Dirección: Plaza Alcalde Tabuenca, 1

Teléfono: +34 976 852 430

E-mail: nfo@valledelhuecha.com

Visitas concertadas llamando al 976 852 430

Horario: Invierno abierto sábados, domingos y festivos de 11’30h. a 13’00h. y 16’30h. a 18’30h.
Verano abierto todos los días salvo los lunes, cerrado.
Horario de 11’00h. a 13’00h. y de 17’30h. a 19’30h.

Iglesia de Santiago Apostol

Construida en 1560, es un edificio de una sola nave con ábside semicircular, sin crucero, que da imagen de espacio unitario y bóveda estrellada.
El altar mayor, fechado a principios del siglo XIX, está rematado con una talla barroca de San Nicolás de Tolentino. A sus pies, el patrón de Albeta, Santiago Apóstol. Ambas tallas son de estilo barroco.

Las dos capillas laterales están dedicadas al Niño Jesús y a la VIrgen del Rosario. En esta última, colocada en un retablo neoclásico de madera hay una talla de la titular que puede datarse a comienzos del siglo XVIII.
Estas dos capillas cumplen una doble función: desviar parte del peso de los contrafuertes a las paredes de las capillas y ocultar los contrafuertes en el exterior por razones estéticas.

Existen otros tres altares dedicados a la Purisima Concepción, a la Virgen de los Dolores y a San Ánton representado en una talla barroca sobre un altar del mismo estilo.

En el coro es digno de admirar un retablillo barroco con una piedad dieciochesca.

Manantial «El Ojo»

En el extremo oeste del parque se sitúa uno de los grandes atractivos de Albeta. Se trata de un manantial de aguas sulfatadas – sódico-magnésicas–, conocido como la «Fuente del Ojo».

El hallazgo de varias monedas romanas (ases) en su interior, en el entorno de la salida de la gruta, hace intuír que los romanos ya conocían sus propiedades curativas.

Las fuentes medicinales eran consideradas por los romanos como sitios sagrados y las colocaban bajo la protección de algún dios. En este caso apenas se efectuaron modidicaciones en su entorno permaneciendo con su aspecto natural.
La fundación de esta localidad posiblemente se deba seguramente a la existencia de este manantial.

Termas Romanas

En julio de 2001 mientras se realizaban trabajos de nivelación en varias fincas, aparecieron restos materiales de un pavimento de época romana. Después de realizar varias excavaciones se comprobó que los hallazgos pertenecían a unos baños termales del siglo II d.c.

Este edificio constaba de apodyterium (vestuario), frigidarium (sala de baños fríos), tepidarium (sala tibia) y caldarium (sala caliente). Para calentar el agua se servían del aire caliente originado en el hipocaustum (cámara de fuego).

Por las dimensiones del recinto, se deduce que las termas no tenían carácter público sino que eran de uso privativo de una familia. Pocas viviendas romanas tenían sus propias termas, lo que hace suponer que su propietario era una persona importante.

Molino de La Hiedra

Este molino, cuyo nombre original es MOLINO DE ARENAS ya estaba en funcionamiento en 1584, según consta en un protocolo de arrendamiento otorgado por su propietario D. Pedro Pérez de Coloma.

No se conoce por el momento, la fecha de construcción del molino. Aparece referenciado en diversas documentaciones de los años 1584, 1611 y posteriormente en 1615 en el acta correspondiente al desplazamiento realizado por Miguel Pérez Coloma en la toma de posesión de su herencia, es donde aparece por primera vez nombrado como MOLINO DE ARENAS.

Fue utilizado para moler los cereales por los habitantes de la localidad hasta la década de los 70 del siglo pasado. Actualmente , ha sido restaurado por un particular que ha conservado su maquinaria original y lo ha destinado a casa rural con el nombre de Molino de la Hiedra.

Más información: www.elmolinodelahiedra.com

Estación de Trenes

Con el incremento del comercio durante el siglo XIX, las comunicaciones se impulsan por ferrocarril. Tras la construcción de la línea Zaragoza-Tudela, se proyecta un ramal para unir Cortes (Navarra) con Borja, que entró en funcionamiento en la década de 1880 y estuvo operativa hasta la década de 1950. La nueva línea unía ambas ciudades pasando por distintas localidades, entre ellas, Albeta.

Para comodidad y mejor servicio de los usuarios se construyó esta estación o apeadero en 1932. Una vez desmantelada la línea se destinó su uso a vivienda y actualmente permanece en manos particulares.

El Batán

El Batán fue construiddo por los hermanos VIdal y Antonio Cardona para el curtido de sus paños, con licencia otorgada por los Condes de Puñonrostro, señores de la mitad de Albeta, el día 9 de marzo de 1787.

Es actualmente de propiedad privada y utilizado como vivienda particular.

Lavadero Municipal de Albeta

Se utilizó hasta la implantación del agua y del vertido público en la localidad en 1974. Su ubicación en la acequia del Molinar aprovechaba la regularidad y el volumen de sus aguas, que permitía no tener que esperar que concluyesen los riegos para ser utilizado, vertiéndose las aguas sobrantes nuevamente en la Huecha.

Pilar Votivo

Torre-Votivo

Este pilar es uno de los dos que había en el camino que une Borja con Albeta en el siglo XVI (San Francisco Javier y la Verónica). Hasta esos lugares se acompañaba la imagen de la Virgen en sus salidas en rogativas para «pedir a Dios que lloviese» y en ellos mismos se recogía.

La primera rogativa de que se tiene noticia se realizó el 5 de marzo de 1730. Los capuchinos del convento de Borja acudierona a recoger la imagen, devolviéndola el 15 de mayo del mismo año.

En mayo de 1753 se realizó de nuevo este viaje con el mismo fin.

Hasta hace aproximandamente treinta y cinco año, el primer domingo de mayo eran bendecidos los términos en el pilar de la Verónica.

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